INDIFERENCIA
¿Por qué tanto sufrimiento? ¿Por qué tanta barbarie? ¿De verdad está sucediendo lo que nos cuentan los noticiarios y los diarios? ¿Será acaso un mal sueño y todo es irreal?
¿Por qué tanto sufrimiento? ¿Por qué tanta barbarie? ¿De verdad está sucediendo lo que nos cuentan los noticiarios y los diarios? ¿Será acaso un mal sueño y todo es irreal?
Hipotéticamente, se relaciona la nueva organización juvenil rusa con la institución educativa antifamiliar de la Komsomol, que organizara la URSS al servicio del PCUS para controlar la sociedad y tener gente para la Nomenklatura.
Precisamente por este motivo, frente a la ilógica de la fuerza se ha de contraponer no otra fuerza mayor, sino una fuerza superior. Aunque parezca clamar en el desierto, la voz del Papa Francisco es contundente: «Dios es solo el Dios de la paz, no es el Dios de la guerra, y los que apoyan la violencia profanan su nombre».
Los amantes de la paz hemos de implorar con confianza, aunque seamos conscientes de nuestra impotencia para modificar el rumbo de los acontecimientos. Pero no podemos olvidar tampoco, al menos los cristianos, que Dios es Señor de la historia y que la paz es un don y una tarea que se nos encomienda.
Ahora me gustaría considerar un aspecto: el daño profundo que, en cualquier sociedad (y en el mundo), produce el nacionalismo que es, por definición, exclusivo y excluyente