¿CONVERSACIONES POLÍTICAS?
El diálogo político debería ser riguroso, abierto, sin contradicciones ni mentiras o medias verdades. Hay que mirar el bien del votante, no de los electos.
El diálogo político debería ser riguroso, abierto, sin contradicciones ni mentiras o medias verdades. Hay que mirar el bien del votante, no de los electos.